16. Detente para asimilarlo todo a lo largo de la ceremonia.
Pídele a quien oficie tu boda que integre un instante de “respiro profundo” para que consigas investigar al público, mira a tu cónyuge y graba el recuerdo en tu cabeza.
17. Haz una cita para cenar de cinco minutos.
Tomarse el tiempo para gozar de una comida completa es irrealizable con muchos invitados gritando por tu atención, pero una cita para cenar de cinco minutos — donde comas un poco y gozes la empresa de tu nuevo cónyuge — es más razonable.
18. Si cinco minutos es bastante, pide tu comida para llevar.
Arregla con el servicio de catering para que les manden unos cuantos cajas de comida para llevar cuando dejen la festividad. Se alegrarán de llevarlo a cabo.
19. Se magnánima.
Saluda a todos con una sonrisa, inclusive si es tu prima segunda con quien no has hablado en unos cuantos años porque ella haya dicho esa cosa (tú sabes de lo que estoy hablando). A nadie le agrada una novia enojada, y a ti tampoco te gustará ser una.
20. De igual modo, permanece listo a lo largo de el alegato del padrino y de la dama de honor.
Si dicen algo no apto es preferible dejarlo pasar sin tener una enorme oposición. Muchas personas lo va a existir olvidado, pero ellos no te olvidarán gritándole al padrino.
21. Otorga un alegato de agradecimiento con tu cónyuge.
Se sentirán bien por agradecer a sus padres, abuelos, e invitados (especialmente esos que han viajado enormes distancias) por hacer viable una oportunidad tan inolvidable en tu vida.
22. Planeen tomar imágenes en grupo en la recepción.
Hagan que el DJ llame a amigos de facultad, camaradas de trabajo y camaradas de conjunto para tomarse unos cuantos imágenes en grupo. Tu fotógrafo podría sugerir llevar a cabo esto antes de la recepción, pero reserva esas imágenes más formales y que consumen un largo tiempo para la fiesta de boda y la familia solamente.
23. Ten precaución con el alcohol.
Este es un día que vás a querer acordarse con claridad para lo que te resta vivir, por eso ten en cuenta de no beber bastante (eso se hace en las bodas de los amigos). Un consejo es tomar un vaso de agua entre cada bebida alcohólica.
24. Transporta zapatos bajos para la recepción.
Unas zapatillas estilo ballet se van a ver grandiosas con un vestido de novia, por eso transporta unos cuantos para ponerte cuando desees tranquilizarte.
25. Nombra a alguien para salvarte de los invitados habladores.
Alguien indudablemente, asi sea tu tía abuela de Poughkeepsie o el padre de un compañero de cuarto de la facultad, va a hablar por los codos aparentemente sin saber que es el día de tu boda. Por esa razón tener a alguien que te además cortésmente es un deber.
26. Ten un instante con tus padres.
Las novias bailan con sus padres y los novios con sus mamás, pero no hay un instante guardado para el otro padre. Reserva uno.
27. No muerdan el pastel.
Novias, aún tienen gente a la que ver y imágenes que sacar, por eso no te conviene tener pastel en el pelo y en el vestido (ni deseas tener que volver a maquillarte). Novios, de esta forma no es como desean comenzar su historia de en matrimonio. Confíenme con esta.
28. Dale al DJ una lista de las canciones que deseas oír.
Así va a ser más posible que escuches tu canción favorita en vez de “Y.M.C.A.”.
29. Ten en cuenta de bailar.
¡Tus melodías preferidas están sonando, la pista de baile está abarrotada de gente que deseas, y tienes causas para celebrarlo! Con condiciones de esta forma, inclusive los novios que “no bailan” lamentarán si no sueltan su Bacon interior.
30. Ten una actitud distendida sobre la noche de bodas.
Si los fuegos artificiales estallan, formidable. Pero luego de un extenso día, muchas novias y varios novios se desploman del cansancio. No te impacientes… va a existir tiempo de sobra para los fuegos artificiales después.
31. Recuerda por qué estás ahí.
En la mitad de toda la distracción y la festividad, ten en cuenta de tener un instante para ver a la persona con la que estás comprometiéndote por lo que te resta vivir y para pensar sobre el sorprendente viaje que tienen por enfrente.